lunes, 21 de marzo de 2011

Un Regalo del Cielo, de Cecelia Ahern

El título de este libro es la mejor manera de describir lo que ha supuesto para mí, pero lo primero el breve resumen del libro.

     " ¿Has pensado alguna vez qué pedirías si te concedieran un deseo?

Lou tiene una vida perfecta, una mujer estupenda, dos hijos adorables y un trabajo que le llena. Pero el éxito tiene un precio y Lou está dispuesto a todo para conseguir llegar a la cima. Una mañana, de camino al trabajo, entabla conversación con Gabe, un mendigo con el que se cruza todos los días. Este encuentro cambiará su vida para siempre porque Gabe no es un hombre como los demás... "

Cecelia Ahern es la escritora de Postdata: Te quiero, del cual he visto la película y puedo decir que no paré de llorar en todo el rato. Así que basándome en esa película y en este libro sé que me voy a leer todos los libros de esta maravillosa escritora. 

Estoy tan contenta de poder hablar, por fin, de un libro que me ha encantado tanto que no sé por donde empezar. Estaba ya un poco cansada de los libros que me gustaban pero que no encendían en mí nada que se aleje del puro placer de leer, pero Un Regalo del Cielo es otra historia.

Hacía mucho tiempo que no me pasaba eso con un libro. Yo suelo leer sobre todo en el transporte público, y con este libro no quería llegar nunca a mi destino aunque eso significase llegar tarde porque la historia me ha cautivado, esa es la mejor palabra para definir lo mucho que me ha gustado.

Es de los libros que me compraré en algún momento porque merece la pena tenerlo en mi biblioteca particular para poder releerlo todas las veces que me apetezca. Me he enamorado de cada una de las cualidades del protagonista, un hombre maravilloso atrapado en la vorágine del éxito y del trabajo que se olvida de su familia a pesar de que en el fondo de su corazón sabe que es lo más preciado que tiene en su vida, por encima del dinero que consigue trabajando tanto.

Un argumento que nos hace abrir los ojos para ver que nos pasamos la vida deseando cosas materiales y cuando las tenemos queremos el siguiente paso, sin pararnos a disfrutar de lo que hemos conseguido y sobre todo sin compartir con nuestros seres queridos. ¿ Qué sería de nosotros sino contáramos con la familia, los amigos, la pareja... ? Seríamos máquinas, y eso es algo que no podemos permitir.

Como dice una amiga mía " Yo quiero trabajar para vivir, pero no vivir para trabajar " Y como dicen las abuelas " El tiempo pasa volando " y eso es tan cierto como que hay sol, así que miremos un poco a nuestro alrededor e intentemos disfrutar de lo que la vida nos ofrece, que es un mar lleno de posibilidades.

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