miércoles, 6 de noviembre de 2013

Vueltas y Vueltas y más Vueltas...


Llevo mucho tiempo queriendo escribir porque lo tengo abandonado y no le dedico el tiempo que se merece porque estoy ocupada, porque a veces no tengo ganas, porque a veces me faltan las fuerzas o las energías suficientes para ponerme delante del "folio" en blanco y empezar... Empezar ¿ por dónde ?



La vida es una noria que no para de girar y en ocasiones estás arriba del todo, con unas vistas espectaculares, con la ilusión de un futuro mejor, con las ganas de tirar para delante, y con fuerzas para enfrentarte a todas y cada una de las circunstancias en las que te veas inmersa. Pero en otras ocasiones, cuando estás abajo, cuando la luz del sol casi no te roza, cuando las vistas no son muy prometedoras, cuando no tienes ni ganas ni fuerzas para nada...

Pero así es la Vida, y hay que asumirlo, debemos intentar pasarlo bien en cada instante porque no sabemos que pasará un segundo después, aunque he de reconocer que conseguir disfrutar de todos los momentos cuando estás triste no es nada fácil porque no le ves salida a nada y dejarlo todo a la suerte no es muy inteligente porque la suerte sólo está de parte de algunas personas, y no siempre son de las buenas.


Está claro que siempre podemos estar peor pero también mejor y no hay que conformarse, pero como he dicho antes no es fácil salir ahí a fuera a luchar, porque todo es un esfuerzo. Todo lo bueno o lo que merece la pena supone esforzarse por hacer mejor las cosas, por ser mejor persona y sobre todo es muy frustrante cuando lo intentas y no recibes mucho o nada a cambio.

Sí, estoy en plan derrotista. Será el tiempo que ha cambiado y ya empieza a llover y hacer frío. O seré yo que veo que voy cumpliendo años pero no voy avanzando a la misma velocidad que lo hace el tiempo. No sabría decir si estoy donde me hubiera imaginado porque nunca me he puesto topes de edades ni me he planteado la vida por etapas, pero sí que es verdad que me imaginaba mejor...


Será la melancolía o el cúmulo de muchas cosas lo que me hace sentirme así o pensar así pero no lo puedo evitar, de hecho prefiero no evitarlo porque eso no significa otra cosa que esconderse de los problemas o de las situaciones feas y yo he sido más de enfrentarme a las cosas, a los problemas, a las personas. Siempre he sido de las que prefiere discutir que callar porque si callo al final la única perjudicada soy yo y ya está bien.

Así que sólo me queda tener fuerzas y sacar la cabeza y el cuerpo entero, si hace falta, para plantarle cara a la vida y demostrar que aquí estoy yo dispuesta a luchar hasta que no me quede nada. Hasta que esté totalmente desinflada y ahí sabré que por mi parte no he podido hacer más y por lo menos estaré tranquila.

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